Proyecto de la Convocatoria 2016 I+D de la Modalidad Retos-Investigación. Financiado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). Ministerio de Ciencia e Innovación. Agencia Estatal de Investigación (Ref: CGL2016-75178-C2-R)

El proyecto ha supuesto un avance en el conocimiento sobre los efectos de diferentes manejos post-incendio en el ecosistema Mediterráneo, en ocasiones resultando ser más dañinos que el propio incendio. Se ha podido comprobar que en general la extracción de madera quemada provoca efectos perjudiciales en el suelo y en la recuperación de la vegetación, especialmente si se realiza con maquinaria pesada y en suelos frágiles y erosionables. Por tanto, sería un manejo que no recomendaríamos salvo causa muy justificada. De realizarse se recomienda cubrir el suelo con acolchados de astilla de madera para minimizar los impactos erosivos. Se ha podido verificar también que en muchos casos la no intervención es la mejor actuación, siempre que se haga un seguimiento de la recuperación, una gestión asistida para actuar si es necesario en algunos casos, proteger o mejorar las condiciones del suelo y vigilar como evoluciona la regeneración natural. En caso de producirse a corto plazo regenerados de pinar con elevada densidad se recomiendan clareos ya que el suelo no parece sufrir cambios sustanciales, además es más sencillo y económico realizarlos a edad temprana (4-5 años), y a largo plazo es una buena estrategia de prevención de futuros incendios y mejora de la diversidad vegetal. Un aspecto muy interesante del proyecto es el estudio de las biocostras, se ha comprobado el papel tan beneficioso que juegan en estadios jóvenes de recuperación post-incendio, así como su sensibilidad a tratamientos como la tala y extracción de madera o la incorporación de mulch en dosis elevadas. Sería interesante tener en cuenta su presencia para no interrumpir su papel de protección y revitalización del suelo. También se ha comprobado que los clareos como manejo forestal preincendio no han producido cambios en la hidrología y aumento de erosión, ya que el mulch generado es beneficioso en términos de incrementar la capacidad de infiltración del suelo. Las quemas prescritas, ya con resultados a corto, medio y largo plazo, no tienen efectos negativos en el suelo, a no ser que se efectúen con una recurrencia muy alta. En los diferentes suelos en los que se ha estudiado este tipo de gestión, se recomienda un uso del fuego con recurrencia superior a 4 años, para que el suelo pueda recuperar niveles adecuados, sobre todo, de nitrógeno, potasio y fósforo. La introducción de ganado, ya sea después de incendios o quemas prescritas, con el objetivo de mantener una densidad de vegetación que no genere riesgo a futuro de grandes incendios, es una práctica cada vez más extendida por su eficacia. De momento, dado que a esta gestión con ganado es bastante reciente, solo disponemos de efectos a corto plazo en el suelo de la secuencia “fuego-paso de ganado”, y aunque se evidencian cambios en el suelo no podemos afirmar que haya efectos negativos que hagan que el suelo deje de ser apto para soportar este nuevo uso.